Resumen: Se desestima el recurso interpuesto y,con ello,la reclamación de responsabilidad patrimonial formulada en solicitud de una indemnización de 248.413,84€,como consecuencia del fallecimiento de un familiar de los recurrentes por mala praxis médica.Se concreta la reclamación en que el fallecimiento se produjo por una perforación en la unión gastroesofágica producida durante una intervención quirúrgica por una insuficiencia aórtica severa y aneurisma,y perforación que no se trató adecuadamente porque hubo un retraso y no se empleó la técnica adecuada para solucionarla lo que finalmente le produjo la muerte.La demandada niega la negligencia médica y defiende que la actuación fue adecuada y conforme a la lex artis. Se desestima el recurso interpuesto,previa valoración de la prueba practicada y,en concreto,los informes periciales emitidos de los que se constata que la perforación se detectó a las 24 horas y fue abordada mediante sutura, aunque luego presentó complicaciones como mediastinitis, peritonitis e infecciones recurrentes. Se emplearon diversas técnicas como clips, prótesis esofágica y tratamientos antibióticos y antifúngicos. Se desestima la responsabilidad por retraso diagnóstico, y con ello la aplicación de la pérdida de oportunidad. Asimismo se constata que la elección de la técnica fue la adecuada así como el manejo antibiótico, la práctica de la traqueotomía o ausencia de gastrostomía sin que las mismas hayan influido en el resultado final.
